Por Abraham Salcido Bastidas
TIJUANA.- Seguramente el alcalde Jorge Ramos junto con su equipo de asesores ya está trabajando para su segundo informe de labores, en esta tarea no solo tendrá que ser capaz sino también demostrar que su gobierno no esta hecho solo de concreto en las vialidades.
Generalmente los ciudadanos dan el voto de confianza a las autoridades municipales en su primer año de gobierno pero no toleran engaños ni “maquillajes” cuando un gobierno se encuentra encasillado en una sola acción de gobierno en los años subsecuentes.
Al alcalde Jorge Ramos, los tijuanenses lo respaldaron en su primer año de gestión en el tan anunciado déficit financiero que le dejó la pasada administración por un monto de 400 millones de pesos, la crisis de la basura y sus macro-jornadas donde la sociedad civil salió con él a barrer las calles.
E incluso los ciudadanos permitieron el incremento de cien por ciento al predial con el fin de respaldar las acciones del alcalde Ramos en materia financiera y que a la par combinó más que con resultados con buenos impactos mediáticos la gestión de recursos federales.
El juego de palabras “Gracias a ustedes, tijuanenses, unidos logramos más”, fue muy recurrente en el primer informe de gobierno del presidente municipal Jorge Ramos. Ahora en el segundo año de su gestión recurre a la misma frase pero “revolcadita”; “Juntos lo estamos logrando” así nos dice en los spots la conductora Rebeca de Alba.
Sí analizamos bien la parte del primer informe del alcalde, no fue de grandes obras, apenas se había repavimentado como plan piloto del Programa Integral de Repavimentación, una de las avenidas de la vía rápida del río, en Otay se trabajaba en una obra de ornato y avances de repavimentación en el Rosas Magallón.
La entrega de útiles escolares por intercambio de juguetes bélicos fue otra acción anunciada y la recuperación de espacios públicos en algunas colonias populares de la ciudad fueron parte del primer informe de gobierno. La ciclo-pista un desastre, el agua se la llevó.
Durante su primer año el alcalde mantuvo un fuerte discurso de rompimiento de vínculos –de otros gobiernos- con el crimen organizado, la depuración policíaca y el respaldo irrestricto del presidente de México Felipe Calderón, esto en medio de una ola de matanzas de la que no se tenga historia en nuestra ciudad como la ocurrida en 2008.
En resumen del primer año de gobierno, el gran logro efectivamente fue más de los ciudadanos, porque permitieron el incremento al predial –este año también 100%-, le dio la confianza al gobierno de ponerle ruedas a la carreta administrativa y fue paciente ante la inseguridad.
Ahora bien, no hay que perder de vista que desde el arranque de gobierno, el alcalde estuvo reafirmando los cuatro ejes estratégicos de su gobierno, a dos años hay que ver los avances no solo de las vialidades, también los otros tres ejes: Seguridad, Gestión de Recursos Federales y el gobierno cercano a la gente.
Quizá el tema que más preocupa ahora a los ciudadanos es el de seguridad pública algo que no está resuelto. Porque tener un gobierno de concreto y por otro lado una ciudad insegura con escasos proyectos de apuntalar el desarrollo social en todas sus expresiones, degenera en un desequilibrio en la sociedad.
Sin temor al equívoco en materia de seguridad, el alcalde sabe que no podrá a estas alturas dejar a una corporación depurada al cien por ciento, tampoco equipada por la actual crisis financiera local y federal, ni profesionalizada y capacitada como se lo planteó desde el principio de su gobierno.
Pero ante eso el alcalde trabaja fuertemente a través de una serie de spots que pretenden decirnos, “somos un gobierno que si bien reconoce el problema de la inseguridad, esta preocupado por ti y tú familia.”
Eso lo podemos observar en los spots televisivos de poca influencia en la sociedad por su contenido informativo, como son las prevenciones contra accidentes, “somos más los buenos que los malos” y así por el estilo. Es decir el gobierno municipal trabaja más en ganar la intención de percepción ciudadana de que tenemos un buen gobierno que en dar resultados.
En la próxima columna, vamos a dar puntual seguimiento a las acciones del segundo año de gobierno del alcalde Jorge Ramos para diferenciar cada uno de los informes el que dio en 2007-2008 y el de 2008-2009 con el fin de medir no un solo eje estratégico de gobierno sino los cuatro. En tanto vale la pena preguntarnos… ¿El rumbo de la ciudad es solo un gobierno de concreto?
Esta columna es parte de la sección Política y Sociedad del quincenal Norte Empresarial
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